2 de octubre de 2014

La vida es demasiado corta...


Un día de estos estaba viendo una película llamada “Julie & Julia”, que me inspiró a escribir esta entrada. ¿Cursi, verdad? Es una de mis cualidades, no lo neguemos. Para quienes no la han visto, se las cuento brevemente.
La película es sobre Julia Child, que fue una chef famosísima de la década de los 60’s, que descubrió su afición a la cocina, durante el tiempo que estuvo viviendo en París en 1950 y sobre como escribe y publica su propio libro de cocina. Y Julie Powell, una neoyorquina que se muda con su marido a un nuevo apartamento.

Julie tenía ganas de hacer algo interesante, ya que su trabajo con los teléfonos no le llena. Es por eso que su marido, le da la idea de escribir un blog. A Julie no se le ocurre ningún tema, hasta que viendo el programa de cocina de Julia Child, se da cuenta de lo maravillosa que era, y lo inspiradora que era para ella. Por eso busca el libro de cocina escrito por Julia, y se decide a cocinar todas las recetas del libro (524) en 365 días.

¿Por qué una película me inspiró a escribir una entrada? Esta película me hizo comprender que la vida es demasiado corta cómo para no ser feliz, demasiado corta cómo para no hacer lo que te llena en lugar de lo que dicta la sociedad como “correcto” o “debido”.
Julie Powell, trabajaba en un lugar que odiaba, un lugar que no la hacía sentir plena ni útil, hasta que un día descubrió lo que la apasionaba, descubrió lo que la hacía sentir viva y así su vida dio un giro de 180 grados (o 360 grados si queremos ser más dramáticos). Julia Child, enfrentó miles de problemas y vicisitudes para poder publicar el libro que se convertiría en su estandarte, pero nunca se dio por vencida.

Me pregunto, ¿cuántos de ustedes están en trabajos que odian solo porque alguien les dijo que sus sueños los iban a matar de hambre?, ¿cuántos de ustedes aprendieron a lidiar con la rutina por miedo a experimentar algo nuevo, algo fuera de tu zona de confort?

¿Cuántos de nosotros  hemos amado a alguien sin que nos ame de regreso?, ¿cuántos de nosotros insistimos en no cerrar capítulos que nos lastiman o no nos dejan seguir adelante?, ¿cuántos de nosotros nos reprimimos porque tenemos miedo a lo que nos van a decir?, ¿cuántos de nosotros vivimos a la espera del mañana para ver si tenemos el coraje de hacer algo?

La vida es demasiado corta cómo para no ser feliz…
La vida es demasiado corta cómo para fingir que sos feliz con lo que haces solo por complacer a alguien…
La vida es demasiado corta cómo para esperar a que alguien haga las cosas por vos…
La vida es demasiado corta cómo para no sonreír todo el tiempo, demasiado corta como para estar siempre encerrados en los mismos ciclos, demasiado corta cómo para estar sufriendo por un pasado que no fue…
La vida es demasiado corta cómo para amar a quien no te ama… La vida es demasiado corta cómo para extrañar a quien no te piensa… Tu alma gemela es alguien que no va a llegar a tu vida silenciosamente, es alguien que vendrá a cuestionar tus convicciones, a cambiar tu cotidianidad, alguien que marcará un antes y después en tu vida… La vida es demasiado corta como para no amar de nuevo, demasiado corta como para tener miedo… gracias por ser ese alguien.

Es demasiado corta cómo para tener que levantarte todos los días para ir a un trabajo que aborreces solo porque paga tus cuentas, demasiado corta cómo para cumplir las expectativas de alguien más… Demasiado corta cómo para dejar que te pisoteen y te usen… Demasiado corta cómo para ser algo que no sea ser feliz.

Ser feliz, no significa que todo tiene que estar perfecto, significa que has decidido mirar más allá de las imperfecciones. Sos alguien bello y único, alguien que nació para sobresalir y brillar. Sé que en ocasiones nos sentimos de poca importancia o inseguros, pero hay que tener presente que somos especiales, que somos importantes y que somos dueños de nuestra vida.

La vida es demasiado corta cómo para vivir preocupado, hay que reírse, hay que amar, hay que expresarse, hay que experimentar, dejar ir las ataduras que nos mantienen aferrados a algo o alguien.

Sé que quizás esta entrada es demasiado optimista y demasiado arcoíris, pero la vida me ha enseñado, que la felicidad no es un destino, es un viaje completo. Me ha enseñado que nadie sale vivo de este juego, que cuando te vas no te llevás nada, más que lo que viviste, lo que experimentaste, lo que decidiste ser.

Podemos empezar con cambios pequeños, sonreír a un extraño, agradecer las pequeñeces que nos pasan, optar a un hobby que nos guste, expresarte sin miedo al ridículo, decirle a las personas que amas que las amas, descubrir nuestra pasión, pero no dejemos que la rutina te mate y te convierta en alguien más… (Y yo que pensé que no podía ser más cursi) 

 Cuidáte, queréte y valoráte... Hasta la próxima

No hay comentarios :

Publicar un comentario